PLANO DEL RECORRIDO
VISTA AEREA DEL RECORRIDO
DESCRIPCION DEL RECORRIDO
Bola del Mundo
Ventanuco del Diablillo
Mirador de la reina de la carretera de la República desde el pico Majalasna
Ventana del Diablo del 3º Pico
La marcha se inicia en el aparcamiento del Puerto de
Navacerrada. Desde allí se coge la carretera asfaltada que lleva a la
residencia militar de Los Cogorros y a la pista de esquí del Escaparate, donde
nace el camino Schmidt, que cogeremos en su comienzo para a continuación virar
a la izquierda y comenzar el ascenso a las cumbres de los Siete Picos por una
serie de caminos pendientes pero de baja dificultad. Subiremos hasta alcanzar
un punto marcado en el mapa con la primera banderola, desde donde puede verse
un impresionante paisaje hacia el sur de la sierra madrileña, desde un profundo
cortado que se asoma a nuestros pies, donde pararemos. Continuaremos la subida
entre rocas hasta avistar la espectacular Ventana del Diablo. Desde allí
iniciaremos la bajada hasta el primero de los picos, el de Majalasna, por
caminos pedregosos relativamente complicados, para a continuación girar a la
derecha por una senda no exenta de pequeñas trepadas y esquivar diferentes obstáculos que nos conducirá hasta la Fuente
de los Alevines, prácticamente seca en estos momentos de escasez de lluvias.
Desde allí continuaremos por el camino Schmidt de nuevo hasta encontrar a la
derecha el camino que nos conducirá hasta el Puerto de la Fuenfria (GR10), cuya
fuente si tiene un chorrito de agua todavía. Tomaremos la senda Cospes que acaba de
nuevo en el Camino Schmidt por el que regresaremos al Puerto de Navacerrada.
Esta etapa es de especial atención y requiere un pequeño esfuerzo, que al final se vera sobradamente compensado y bastará una buena
provisión de agua si el día es soleado, ya que las fuentes están prácticamente
secas. Igualmente un buen bocadillo, que comeremos en el Puerto de la Fuenfría,
a mitad del recorrido aproximadamente, así como pantalones con culotes para las arrastradas y guantes para no arañarse las manos.
Descripción de la ruta muy interesante por un wikiloquero
Llegamos a la pradera del primer Pico, el Majalasna (WPT007) y no podemos resistir la tentación de subir.
Una vez arriba, las vistas del cordal de Siete Picos y el Valle de la Fuenfría son espectaculares.
Bajamos y comenzamos la Senda de los Alevines, de camino a Collado Ventoso.
Esta senda cruza la pradera de Majalasna, y la cogemos dirección norte hacia Collado Ventoso.
La senda transcurre por la Umbría de la Navazuela, y baja y sube para adaptarse al terreno, a la vez que obliga a hacer pequeñas trepadas y esquivar diferentes obstáculos.
Destaca un paso bajo una roca.
Está perfectamente marcada con círculos amarillos en los árboles y con señales de pintura.
Ya cerca de Collado Ventoso (WPT008), nos encontramos con la Fuente de los Alevines.
Justo cuando el Collado Ventoso se muestra a nuestra vista, giramos a la izquierda para dejarlo a nuestra espalda y bajar por el tramo que comparten nuestra ruta, la senda de los Alevines, con el Camino Schmidt.
Más adelante se separarán en un cruce bien señalizado, y mientras que el camino Schmidt continuará rumbo al albergue de Peñalara, el nuestro lo hará dirección al puerto de la Fuenfría.
Por fin llegamos al puerto de la Fuenfría y ahí hacemos la parada de rigor para descansar, comer y estirar un poco (WPT010).
El camino ya está hecho, ahora queda regresar hasta el Puerto de Navacerrada, siguiendo la Senda de los Cospes primero y el Camino Schmidt después.
El dragón no ha despertado, por lo menos esta vez...
(1) Al aire libre. Alfredo Merino. El Mundo.
(2) Del Post de Rosa Alonso, De leyenda, El Guadarramista.
(3) Siete Picos. ¿Cuáles son sus nombres?
Blog: Cuarzo, Feldespato y Mica.
Descripción de la ruta muy interesante por un wikiloquero
La Sierra del Dragón, por bning (wikiloc)
Nos apetecía recorrer viejos parajes. Y nos remontamos al siglo
XIII, cuando el arzobispo Rodrigo Jiménez cita en su 'Historia Ghotica' a la
Sierra del Dragón. No fue mucho más tarde cuando Alfonso X el Sabio recogió el
topónimo en su Crónica General de España (1).
Pero el hecho de que se parezca Siete Picos a la cresta
de un dragón, ¿es una pura casualidad?. A nosotros nos gusta creer en una vieja
leyenda que nos cuenta que, no hace tanto tiempo, vivió un animal gigante que
recorría el mundo en busca de la fuente de la eterna juventud. Su única pista,
un lugar señalado con una veta de cuarzo puro. Obsesivamente arañaba con sus
garras cualquier piedra que llamase su atención sin encontrar nada. Poco a poco
se fue cansando, ya no sólo por los golpes y heridas que la búsqueda provocaba
sino más bien con la desazón que el fracaso le provocaba. Desde que se enteró
de la existencia de este maravilloso lugar, mil noches habían transcurrido, mil
noches sin dormir y mil días sin comer. Casi moribundo, cayó sobre el Lago
Baofeng. Fue casualidad que, en ese momento, pasase con su barca un viejo
pescador. Fue casualidad que el pescador desafiase su miedo y se acercase al
dragón. Y fue también casualidad que hubiese escuchado a sus abuelos la
historia de la fuente de la eterna juventud. El dragón, obsesionado, le
preguntó por la fuente y el pescador le contó la historia: "… en una lugar
muy lejano, rodeada de pinares se escondía una gruta tallada en granito. En su
parte más profunda, un cristal de cuarzo puro y junto a él una fuente, la
fuente de aguas mágicas …" El dragón levantó el vuelo, mágicamente
recuperado, y mil noches tardó en encontrar la gruta que el pescador le había
indicado. Cuando por fin la halló, bebió de sus aguas, y tras ello se
transformó en roca. Conserva así su apariencia para siempre, su juventud., pero
¿a qué precio?. (2)
Nosotros, con motivaciones distintas y con mucho más
interés en la cresta que en la fuente (o eso nos decíamos), comenzamos temprano
dirección a la pradera de Siete Picos desde el aparcamiento del Puerto de
Navacerrada. Llegamos primero a (WPT001) la residencia de Los Cogorros, de ahí
cogimos la senda que nos lleva, dejando a un lado el cerro del Telégrafo y la
Virgen de las Nieves, hasta la pradera de Siete Picos (WPT003), donde, en la
Piedra Ventolera, continuamos hacia el Séptimo Pico y dejamos a un lado la
senda Herreros, para la próxima vez. La subida es durilla y transcurre entre
pinos y piedras, con hitos que marcan muchas posibilidades, pero merecerá la
pena una vez se llegue a la cresta de Siete Picos, la cresta del Dragón. Nada
más llegar un grupo de buitres leonados arrancan el vuelo y nos dan la
bienvenida. El Séptimo Pico es el más alto de la cresta.
Llamado también (3) Pico de Nemesio López (Geográfo y
Meterólogo), dispone de unas vistas espectaculares hacia Segovia y hacia
Madrid, y vertiginosas hacia el cóncavo de Siete Picos u Hoyo del Terradillo.
Tras su subida casi obligada por el hecho de estar ahí y hacer cumbre, bajamos
para continuar por el cordal y el resto de los picos. Tirados aquí y allá, los
picos, montones de cantos enormes de granito colocados al azar, parecen el
resultado de un caprichoso juego de dioses. Llegamos al tercer pico, llamado
alguna vez(3) como pico de Benito López (Cartógrafo), en donde se encuentra la
Ventana del Diablo (WPT005). De ahí seguimos hasta el segundo pico(3) o Pico de
Tomás López (Cartógrafo de Carlos III y origen de la saga de los López que fue
dando nombre a todos los picos menos al Majalasna) al que subimos (WPT006) para
tener una vista completa de la cresta del Dragón y del cóncavo de Siete Picos.
Bajamos del segundo pico y nos dirigimos a un camino que nos llevará a la
pradera de Majalasna, sale entre el tercer y segundo pico, dirección sur.
Llegamos a la pradera del primer Pico, el Majalasna (WPT007) y no podemos resistir la tentación de subir.
Una vez arriba, las vistas del cordal de Siete Picos y el Valle de la Fuenfría son espectaculares.
Bajamos y comenzamos la Senda de los Alevines, de camino a Collado Ventoso.
Esta senda cruza la pradera de Majalasna, y la cogemos dirección norte hacia Collado Ventoso.
La senda transcurre por la Umbría de la Navazuela, y baja y sube para adaptarse al terreno, a la vez que obliga a hacer pequeñas trepadas y esquivar diferentes obstáculos.
Destaca un paso bajo una roca.
Está perfectamente marcada con círculos amarillos en los árboles y con señales de pintura.
Ya cerca de Collado Ventoso (WPT008), nos encontramos con la Fuente de los Alevines.
Justo cuando el Collado Ventoso se muestra a nuestra vista, giramos a la izquierda para dejarlo a nuestra espalda y bajar por el tramo que comparten nuestra ruta, la senda de los Alevines, con el Camino Schmidt.
Más adelante se separarán en un cruce bien señalizado, y mientras que el camino Schmidt continuará rumbo al albergue de Peñalara, el nuestro lo hará dirección al puerto de la Fuenfría.
Por fin llegamos al puerto de la Fuenfría y ahí hacemos la parada de rigor para descansar, comer y estirar un poco (WPT010).
El camino ya está hecho, ahora queda regresar hasta el Puerto de Navacerrada, siguiendo la Senda de los Cospes primero y el Camino Schmidt después.
El dragón no ha despertado, por lo menos esta vez...
(1) Al aire libre. Alfredo Merino. El Mundo.
(2) Del Post de Rosa Alonso, De leyenda, El Guadarramista.
(3) Siete Picos. ¿Cuáles son sus nombres?
Blog: Cuarzo, Feldespato y Mica.
LAS FOTOS DE LA DESCUBIERTA
Bola del Mundo y La Maliciosa
Bola del Mundo
Ventanuco del Diablillo
Collado de Marichivas desde El 1º pico el Majalasna
Fuente de los Alevines
La Bola del Mundo desde 7 Picos
En el séptimo pico, Peñota al fondo
LAS FOTOS DE LA SALIDA
Las fotos de Beatriz
Mis fotos
Las fotos de Beatriz
Las fotos de Emilia
Las fotos de Javier Ortiz
Las fotos de Sergio
Las fotos de Pilar Ruiz
Mis fotos
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